Comienza la temporada Aries y con ella un cierre de ciclo y comienzo de uno nuevo. Es el año nuevo astrológico.
El sol entra en el 0° de Aries (punto vernal) dando lugar al equinoccio de primavera en hemisferio norte y de otoño en el hemisferio Sur. El día y la noche duran lo mismo, hay un equilibrio entre luz y oscuridad.
Este cielo nos da un panorama de los próximos 3 meses.
Este año nuevo astrológico inicia con Marte, el regente de Aries, en Géminis haciendo un aspecto fluido con Kirón en Aries y trígono a Saturno en Acuario. Es una energía para emprender acciones nuevas, desde nuevas perspectivas, estando más abiertxs a las opciones que aparecen.
A su vez es un accionar no tan combativo, en el sentido de aflojar un poco con la susceptibilidad/ estar a la defensiva. Aries no solo es lucha y competencia sino energía con mucha potencia. Así que a usar toda esa energía para hacernos más versátiles y animarnos a poner en movimiento todas esas grandes ideas que tenemos.
Es poner en acción lo que decimos/pensamos y también poner en movimiento nuestras ideas, jugar con ellas, intercambiarlas y construir puentes desde ahí también.
Mercurio está en Piscis en sextil a Urano en Tauro así que está muy bien para mover valores estancados y conectarnos desde lugares más auténticos y en vínculos más reales. A comenzar el año con lo genuino y lo diferente.
En este caso esta potencia será bien encauzada si las sabemos conectar no desde la competitividad sino desde la interacción con estructuras horizontales, el trabajo comprometido en grupos.
Atención con la luna en Géminis que está en conjunción con el nodo norte y cuadrando a Neptuno, nos hace presa fácil de la idealización, la ilusión y las fantasías. A limpiar fantasías mentales y emocionales.